Para el medio ambiente

La limpieza y el mantenimiento de la casa tiene un importante impacto sobre el medio ambiente por dos motivos principales.

Por un lado, se trata de una versión doméstica de la actividad industrial de tratamiento de superficies. Podríamos limpiar la casa simplemente con agua fresca y frotando con mucha energía, pero por lo regular empleamos productos químicos.

Por ejemplo, si nos referimos solo a las ventanas, la limpieza debe eliminar una serie de compuestos depositados sobre el cristal: suciedad procedente de la polución atmosférica, grasa de los humos de cocina y huellas de dedos, alquitrán del humo de cigarrillos, etc. Los limpiacristales comerciales están compuestos principalmente por disolventes, en especial alcohol, pero también por otros compuestos llamados glicoles, algunas de cuyas variantes pueden ser potencialmente tóxicas.

Cualquier casa tiene una gran variedad de superficies: paredes, pintadas o empapeladas, azulejos, esmaltes, suelos de madera, terrazo o material sintético, cortinas, muebles de madera, lavabos y bañeras de cerámica, fregaderos de acero, etc. Y cada de una de estas superficies tiene una serie de productos específicos de limpieza (para darse cuenta, no tiene más que recorrer con detalle las estanterías de la sección de limpieza de un supermercado). A estos productos hay que añadir la gran cantidad disponible de tipos de pinturas y barnices, así como de productos auxiliares como tapaporos o decapantes.

Por otro lado, la limpieza supone también un tipo de guerra biológica, que pretende mantener a raya a los muchos seres vivos que comparten con nosotros la vivienda: arañas, bacterias, protozoos, insectos, roedores, etc. En este caso, también podemos combatirlos con una pala matamoscas y una escoba, pero, por lo general, usamos compuestos químicos biocidas. Y lo que es malo para una mosca, también puede serlo para un ser humano.

Para tu bolsillo

Nuestros armarios de limpieza, cuanto más complejos, más caros. Reducir el contenido de nuestro armario de limpieza a los productos realmente imprescindibles nos permitirá ahorrar bastante dinero. El coste total de los productos contenidos en un armario de limpieza completo puede ascender fácilmente a los 200 euros al año: con las alternativas sencillas que te sugerimos, el coste al año se puede reducir a apenas 50 euros.

Otro tipo de beneficio de una gestión adecuada del armario de la limpieza, es la reducción del riesgo de intoxicación. Se trata de un beneficio difícil de evaluar en dinero, pero muy real.