Para el medio ambiente

La iluminación representa más del 10% del consumo eléctrico doméstico y más de 5.000 GWh en el 2017 en alumbrado público.

No se dispone de datos muy fiables sobre qué porcentaje de lámparas es de bajo consumo y es difícil realizar un inventario que cubra fehacientemente las lámparas y sus consumos. Pero sí que se sabe que existe un gran potencial de mejora para la reducción del consumo eléctrico y, por lo tanto, las emisiones contaminantes que supone generar dicha electricidad. Así, el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía, en 2017 elaboró un informe sobre alumbrado público en la que hace referencia a ahorros entre el 65% y el 85% mejorando las instalaciones

La reducción del consumo que supone instalar una sola bombilla de bajo consumo se estima en unos litros de petróleo y cerca de media tonelada menos de CO2 emitido a la atmósfera al año.

Para tu bolsillo

En 2011, se estimaba que de media existían 23 bombillas de media por hogar. De estas, solo 7 eran de bajo consumo y un 1% de bajo consumo. Esto suponía un total de 410 kWh/año por hogar. Sustituir todas las bombillas por bombillas de LED podría ahorrarnos hasta un 80% de la energía destinada a electricidad. Esto, con el precio de la electricidad medio del 2021, aproximadamente 120 €/MWh, supondría un ahorro anual de 4 € . 

Las lámparas de bajo consumo son mucho más caras que las convencionales. Pero hay que tener en cuenta que consumen entre la cuarta y la quinta parte de las convencionales y que duran 10 veces más. Unos sencillos cálculos nos muestran que se amortizan aproximadamente en el plazo de un año. A partir de este momento, todo es beneficio.